martes, 9 de enero de 2024

4 - Enigma

Podía verla desde otro plano.
Nunca dudé de su capacidad de enfrentar lo que se le cruzara en el camino.
Siempre amó la soledad y el silencio, pero ahora la cosa era diferente. Se enfrentaba a una soledad verdaderamente desolada, a un silencio irremediablemente ensordecedor.
Un planeta en ruinas a sus pies,  a sus espaldas. Todo a su alrededor era escombros y cadáveres.
¿Alguien sería capaz de sobrevivir a semejante e innombrable desastre?
Todavía aturdida por el estruendo de la última explosión logró pararse después de varios intentos; entre sombras y confusión, caos y desesperanza.
Lloró, lloró hasta que sus lágrimas limpiaron el polvo de su cara. Lloró hasta toparse con lo que sería su única posibilidad. Lloró hasta que sus lágrimas se confundieron con la única porción de mar que, entre rocas, no había sido alcanzada por peces muertos.
Se sentó de cara a la hecatombe sabiendo que sus próximas horas serían decisivas. ¿Sobreviviría a cualquier precio o terminaría definitivamente con su vida en un mundo ya acabado?
La humanidad siempre fue un interrogante para ella y como una broma del destino, fue la única sobreviviente de una catástrofe anunciada, consecuencia de la desidia y la soberbia de un capitalismo salvaje al que ella siempre se enfrentó.

Lala ✨️
✍️ Laboratorio de letras


















No hay comentarios.:

Publicar un comentario